jueves, 29 de octubre de 2009

Por primera vez, la oposición le marca la cancha al gobierno

Lo fundamental de lo que pasó entre ayer y hoy lo dice Lilita en una conferencia de prensa desaliñada que da a media tarde junto a Adrián Pérez. Dice allí que el gobierno perdió la iniciativa, que ahora la tiene la oposición. Cristina, dice Lilita, debió llamar de apuro a Recalde y pedirle el proyecto sobre prestación universal y darle forma de DNU. O sea, seguir a la oposición. Que pondrá su propio texto sobre prestación universal como el primer artículo de su proyecto de ley electoral. Todo contundente, todo cierto, lo de Lilita. La verdadera jefa de la oposición, la única con verdadera fibra. Es verdad: por primera vez desde la derrota del 28 de junio, la oposición le gana una pulseada al gobierno y es éste el que debe correr detrás de la oposición y no al revés. Un contraste que vale especialmente para los santafesinos: Binner, desde Mar del Plata, adhirió fervientemente...al decreto de Cristina. No al proyecto y las críticas de Lilita. Clarísimo, no? Quien quiera entender, que entienda, de una buena vez. El PS sigue jugando a dos puntas, como hizo con la ley de medios. Un guiño para acá, otro para allá. En Mar del Plata, Binner se creyó seguramente muy astuto al agregar a su apología del decreto de Cristina un pronóstico sobre que el kirchnerismo ya está frito. Hermes: con eso no vas a ningún lado. Estás como Das Neves, mucho grito y golpearse el pecho, pero después, al momento de los bifes, te vas al mazo. Como dijo mi amigo el Loco a propósito del voto socialista a favor de la ley de medios, se refugiaron en su principismo, en que había un viejo proyecto parecido, del año 89, de Estévez Boero, para apoyar el proyecto K de medios. Lástima que no tomaron nota de que la sociedad santafesina repudia todo lo que venga de K, y su afán de hegemonía sobre los medios en especial. Este dato político primordial supera cualquier consideración coyuntural sobre los contenidos de las leyes o normas en discusión. Acá se trata de sumar fuerzas democráticas contra un gobierno que tiene una fuerte vocación antidemocrática, y que si no rompió todavía del todo con los controles y contrapoderes del sistema democrático es porque sencillamente no puede, nada más. Binner puede perorar todo lo que quiera sobre Estévez Boero, pero la boleta ya se la comenzaron a pasar los votantes con el voto del 27 de septiembre. Absurdamente, los medios porteños se empeñaron en ver ese día una victoria de Binner... sobre Reutemann. Una bobada monumental que hizo reir con ganas a los periodistas locales. En Rosario, el PS fue para atrás de manera contundente y no llegó al 30%. En la ciudad de Santa Fe ganó el radical Barletta, que ya se posiciona para pelearles la candidatura a gobernador en el 11. Y en decenas de ciudades y comunas del interior, fueron también los radicales los que salvaron las papas del Frente Progresista. En fin, ahora, en el día en que Lilita proclama con todas las letras la primera victoria opositora ante el gobierno, Binner se pone a cantar loas al decretazo apurado de Cristina. Chau, Hermes Juan. Arrivederci.

lunes, 26 de octubre de 2009

Debate en el Kursk; inquietante paralelo con el 76

Se debate en el Kursk: humo de cigarrillos, café en vasitos de plástico, en fin, lo de siempre. ¿Se viene el Colorado en el 11? Comento que los de la CCC han vuelto a ocupar la plaza enfrente de mi departamento. Los veo todos los días. Marginales en serio, el ultimísimo escalón social, traídos del extremo sur y oeste de la ciudad. Se habla del caso de la orga de Jujuy, de Milagrito y de sus 70 mil lúmpenes a sueldo, de los 10 palos al mes que recibe, etc. ¿Qué pasará con todo esto a partir del 2011? Habla el Loco: se viene una derecha fea, sin chumbos, pero fea. Van a barrer con los negros, con los pobres, con los cartoneros. Mmmm, no sé, le digo yo, fijate lo maricón que está el PRO en Capital, cuidan la corrección política como nadie. No, Pablo, replica el Loco, revoleando el pucho, lo que digo es que para 2011 la bronca de la gente, con todo lo que está pasando, con la inseguridad y el desempleo, va a llevar a una reacción social a lo 76, pero sin milicos ni golpe. Lo que estamos viendo es, de nuevo como en el 73-76, una pelea mortal entre los dos peronismos, el de derecha y el de izquierda. Pero ahora el poder y la presidencia los tiene la Tendencia y la derecha está en el llano, con el PJ disidente, con algunos pocos gremios. La pelea es entre ellos, y va a ser cada vez más pesada. Néstor está largando a las orgas a la calle, les está dando luz verde de a poco, como se vio en Jujuy, también en Mar del Plata, en cualquier momento en Santa Fe. Es un poco exagerado, pero es difícil no darle alguna razón al Loco. Yo agrego: ¿Cuantos ex Tendencia están en el gobierno o en su entorno? Decenas y decenas. Y después están los seguidores fieles del setentismo, los tantos Rossi y Carlotto Jr., que aunque no hayan vivido los 70, son fanáticos creyentes en "la lucha", están las orgas con buena plata y prensa propia, etc. Sumemos las operaciones tipo Pagni y Ciro James, la compra de diputados, la exasperación que va a traer la implementación de la ley de medios a marchas forzadas. Pero la pelea no es solamente entre PJ de derecha y la Tendencia, no, la pelea es entre el gobierno y toda la oposición en su conjunto, sea PJ o no. Morales sufrió a la Orga K y no es PJ. Mirá las operaciones contra Macri, y no es PJ. No, la violencia de Néstor va a ir contra toda la oposición y contra esa gran parte de la sociedad civil que enfrenta al régimen K. Como sea, llegaremos a mediados del año 11 al rojo vivo. Y sí, va a ser así, coinciden todos en el Kursk. Y como en el 76 el viraje podría ser brutal, insiste el Loco. Sobre el 76, recordemos que "nadie" apoyó el golpe...dicen ahora. Ocurre que la gran mayoría de la sociedad lo apoyó, porque estaba aterrada por el caos violento del peronismo y sus facciones armadas. Todos lo recordamos, en el Kursk, dada la avanzada edad que tenemos. Entonces el forzado paralelo del Loco con la actualidad vale, salvadas las enormes diferencias, que por suerte existen. Ahora las clases medias enfurecidas con la inseguridad urbana, la crisis, los piquetes, el paco, no van a pedir al ejército, sino a un restaurador de las leyes de saco y corbata, un Macri, un De Narváez. Fin del debate en el Kursk: hay que cerrar páginas a lo tonto, así que desfilamos por la escalera de la catacumba hacia la Redacción.

jueves, 22 de octubre de 2009

Fox y el 7 unidos por el Gordo,que denuncia una nueva conspiración

El Gordo volvió a la carga. En el programa ultraK 6,7,8 se despachó contra Bilardo, al que apenas días antes había abrazado entre lágrimas, y contra Vila, el de América. Hay una conspiración, dijo, para tumbar al heroico luchador social Julio Grondona. Un hombre del campo popular, claramente, al que la derecha busca sacar de su cargo, tan democráticamente ganado allá por 1978. Se debate en el programa de fútbol (?) de Fox, ese en el que charlan como si estuvieran en un café el Chavo Fuchs, los tipitos de Niembro y Arcucci. Se toman la revancha contra los periodistas de información general, que de toda la vida miran desde arriba a los deportivos. Es que en el video del programa del 7 es evidente que nadie sabe nada de nada de fútbol. Diego les explica a Barone y cia que necesita a Pareja para que "me barra el fondo" y lo miran como si hablara chino. Diego cuenta que le quieren sacar a Di María, porque "sube bien pero baja mal por izquierda". Caras de póquer en el estudio. Pero además el Gordo habla, cuándo no, de una conspiración, de otra más. Acá los muchachos de 6,7,8 se prenden, porque ellos de conspiraciones..., si sabrán. Si no, que le pregunten a Pagni. Es, la que denuncia Diego, una conspiración en su contra, claro está. Iban por Grondona aprovechándose de sus dichos sobre las felaciones generalizadas para todo el género humano. Vila se ha aliado con Bilardo, afirmó, para quedarse con la AFA. Bilardo, que lo habló a Leme, su ayudante. Un pecado mortal. El Chavo Fuchs repite la tesis del piquetero D'Elía: la clase media argentina lo mata a Diego por ser un negro, y exhibe un ejemplar de Ambito a modo de prueba. En fin, si todo esto es periodismo...Fox y Canal 7, o sea, Niembro y Bauer, unidos en el mismo barro, con el Gordo como amalgamante.

domingo, 18 de octubre de 2009

Población mundial y hambre: Elías, un ejemplo más de negacionismo demográfico

Un buen ejemplo de la negación demográfica: hoy Jorge Elías en La Nación se sale de agenda y se despacha contra el dato reciente de la FAO, acerca de que se superaron los mil millones de hambrientos en el mundo. Elías detalla el crecimiento galopante del hambre, pero olvida hacer algo básico: contextualizar ese dato con el resto de la información demográfica, que lo conforma y explica. Da las cifras de hambrientos y destaca cómo han crecido, pero escabulle la del total de habitantes. Un gesto muy católico, me parece. No conozco a Elías, no sé qué formación tiene, pero no me sorprendería si fuese de la Católica o de por ahí. Señalar la cantidad de hambrientos pero no decir cuántos habitantes tiene el mundo y cuantísimos menos tenía hace muypocos años es típicamente católico. No es deshonestidad intelectual, pero sí su primo hermano, el negacionismo. Por lo demás Elías cae en populismo franco cuando critica a los líderes mundiales por aplicarse a fondear el sistema financiero el año pasado... en lugar de alimentar las bocas hambrientas. En este punto se pone, argumentalmente hablando, en la misma línea de la izquierda nacional-populista, Luis D'Elía y Evo Morales.

el artículo: http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1187642&pid=&toi=

jueves, 15 de octubre de 2009

Sexo oral para todo el mundo

A pedido del público vuelve este post:

El Gordo llora como loco y se abraza con el doctor, o sea, con Bilardo, que también llora como loco. Una fiesta en el Centenario. Bolatti, o como se llame, hizo un gol sobre la hora, no muy diferente de la carambola de Palermo, o sea, de Martín, bajo la lluvia del Monumental. Ya en la conferencia de prensa, el Gordo, fríamente y con los cartelitos de los sponsors de fondo y la Coca Cola adelante, suelta la famosa frase: que me la chupen. Por si fuera poco, insiste con la fina metáfora: que me la sigan chupando. Habla, claro, de los periodistas, que para él no fueron lo suficientemente complacientes con sus locuras. "Esta noche me recibí de técnico" fue otra frase memorable que quedó injustamente eclipsada por la del sexo oral para todo el mundo. La reacción es la previsible y, supongo, la que debe ser: condena, crítica redoblada ante la total ausencia de autocrítica, pedidos de renuncia. Pero yo todavía me río cada vez que me acuerdo. Me imaginaba a los gerentes de RRPP, o de imagen corporativa o lo que sea, de las empresas patrocinantes de la Selección helados ante el exabrupto del Gordo. Ojo, yo a Diego lo echo a patadas de la Selección mucho antes de esto, y traigo de vuelta al Loco Bielsa, y si no es posible pongo a un alemán rígido y bien facho. Pero la obscenidad del Gordo Argentino me hizo revolcar de risa. ¡Que me la chupen! ¡Que me la sigan mamando! No sé si las promotoras de Coca Cola se habrán sentido aludidas, o si habrán tenido el impulso de cumplir con el deseo del 10. Estaría bueno ir a preguntarle a una psicoanalista feminista, de esas feas de lentes con biblioteca atrás, qué opina de la propuesta de sexo oral del Gordo Nacional, que la mina hable de la problemática de género, de la sexualidad como poder, etc, etc. La anécdota me hizo acordar a Yeltsin puteando a los periodistas en plena Casa Blanca. Clinton, al lado, no podía parar de reirse. Si yo dijera un poquito de lo que dijo él me crucifican, comentó Bill entre lágrimas de risa mientras abrazaba al borracho de Boris. Ahora el Gordo le dio una vuelta de tuerca al exabrupto. ¡Que me la chupen! Solamente a él se le podía ocurrir una salida una así. La seriedad con que lo dijo hace mas reidera la situación. Ya superado el trance, vamos adelante con el Titanic de la Selección, a toda marcha hacia Sudáfrica, con Martín, con Bolatti, con Bilardo y la mar en coche. Y si sale mal, será culpa de los periodistas o de alguien más poderoso, que subrepticiamente le cortará las piernas a nuestro héroe, a nuestro Gordo. Y si por algún milagro la aventura sale bien, el Gordo volverá a la carga desde Johanesburgo: a todos los periodistas argentinos... que me la chupen! Bueniiisssimo!

martes, 13 de octubre de 2009

El Nobel de la Paz de Obama y el negacionismo pacifista

El Nobel de la Paz que ganó sorpresivamente Obama el pasado viernes replanteó, entre otras cosas, el valor y significado del concepto de “paz”. El término Nobel de la Paz evoca de inmediato a un pacifista incondicional, como parecieron entender algunos columnistas europeos, que le enrostraron a Obama la guerra de Afganistán y el mantenimiento de Guantánamo. Pero los Nobel de la Paz no son pacifistas, sino, generalmente, estadistas pragmáticos que se han destacado en la solución de graves conflictos (Henry Kissinger, por ejemplo. Existe otra categoría de Nobel, cierto, la de defensores de los derechos humanos que resisten a dictaduras).
El pacifismo tout court y apriorístico parte de una presunción de superioridad moral que niega un terreno central de la praxis social-histórica: la guerra. Porque la guerra, sencillamente, es parte de la cultura y la historia humanas. No de la mejor parte, sin dudas, pero ahí está, imbricada en la trama histórica, onmipresente. La guerra no debe ser, ni objeto de apología, como hacen los nacionalistas y fanáticos religiosos, ni negada a priori como “inhumana”, como hacen los pacifistas (una actividad que está presente en todos y cada uno de los siglos de la Historia difícilmente pueda calificarse de "inhumana").
Es interesante apuntar que el pacifismo occidental es profundamente burgués. Kant, abrumado por las interminables guerras europeas de su tiempo, dio con su “paz perpetua” el modelo del pacifismo contemporáneo, de cual Bertrand Russel puede ser el mejor emblema. Este pacifismo liberal es una de las causas de la alienación de la causa israelí en Occidente, lo que denota su incompatibilidad con la existencia misma de Israel, que depende de un estado de guerra cuasi permanente para no desaparecer.
Luego de la II Guerra Mundial y más aún desde la caída del comunismo soviético, el paficismo se ha vuelto sentido común en Occidente y sus aledaños. La entrada en escena de Obama y la forzada lectura de su presidencia hecha por el comité noruego del Nobel acentúa esta tendencia. Que lleva al contraste manifesto entre las sociedades que rechazan la guerra per se, o al menos su costo humano, con Europa a la cabeza, y las sociedades que aceptan ese costo sin duda alguna, como China, Rusia, India y el resto de Asia. Es evidente que el rechazo de la guerra es un lujo moral que Occidente recién se pudo dar recientemente, y sólo gracias al enorme gap tecnológico y económico que lo separaba del resto. Pero estos abismos tienden a extinguirse. El caso afgano, con los europeos rechazando dar más hombres pero ofreciendo a cambio más dinero, es ilustrativo al respecto. Otro caso emblemático es Irak: allí EEUU "invirtió" la vida de 4500 hombres, lo que implicó un costo político enorme que expulsó a los republicanos del poder. Ahora Obama apura el paso para irse de Irak como sea. China e India darían gustosas diez o veinte veces aquella cifra de bajas a cambio de dominar Irak y acceder a sus inmensas reservas de crudo. No se preocuparian ciertamente de asuntos tales como la opinión internacional o la ONU, ni mucho menos de dar a los iraquíes un gobierno democrático como han hecho los estadounidenses. Chechenia y Tíbet serían para ellos el modelo a aplicar.
El sacrificio de los propios hijos en el altar de la guerra ya no figura, entonces, en el ADN de Occidente. Ir a la guerra era hasta hace pocas generaciones un destino ineludible en las naciones occidentales. Cada generación aportaba sus muertos. Pero, como se dijo, luego de la II Guerra, Europa, y de Vietnam, EEUU, esto cambia radicalmente. Vietnam es ante todo la negativa rotunda de toda una sociedad a guerrear. Los vietnamitas del general Giap centran su estrategia en este dato vital. Era mucho más importante matar enemigos que tomar una determinada posición, lo que invertía totalmente la doctrina militar tradicional. Irak y Afganistán confirman este viraje radical.
Mientras se niega a sí mismo la opción de la guerra, Occidente experimenta fenómenos como el ascenso del islam radical y la irrupción de las grandes naciones asiáticas al rango de potencias mundiales. Dos adversarios que, por cierto, no sólo no se niegan la opción militar, sino que _en el caso del islam radical_ hacen de ella su opción preferencial (aunque en este caso no existe confrontación entre potencias, o no por ahora. Pero será diferente si los extremistas islámicos terminan por dominar Pakistán, por ejemplo). Se está así ante una competencia asimétrica en favor de estos nuevos actores, al mismo tiempo que aquel gap tecnológico y económico occidental desaparece. El resultado final de esta confrontación es evidente y sólo cuestión de tiempo. Porque un bando no quiere “poner los muertos”, mientras el otro desborda de ganas de hacerlo.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Redacciones alteradas por la ley de medios

La puja por la ley de medios bajó definitivamente a las redacciones, y para mal. La polarización K ha desquiciado a muchos periodistas. En un diario se viven situaciones inverosímiles y poco felices. Ocurre que los dueños están frontalmente en contra de la ley, como es lógico, dado que la norma los despluma en términos patrimoniales. Ergo, sin detenerse a pensar, bajan la orden tajante de informar muy sesgadamente contra la ley. Como si esto los beneficiara, como si dar una información equilibrada no fuera mucho mejor, incluso como estrategia de confrontación (al ver al medio tan desbalanceado, el público, con toda razón y buen olfato, piensa: es una pelea de ellos. Ahora, como les tocan el bolsillo, chillan. Antes no decían nada, al contrario, hacían negocios). Enfrente de esta patronal desequilibrada está el gremio, con todo su aparato comunicacional, organizativo y académico. A favor 100% de la ley, militando por la ley. Se hacen asambleas furibundas en la Redacción, donde se crea un clima de "con ellos o con nosotros", donde nadie se atreve a decir, "no mirá, yo no apoyo la ley, no me gusta". Pegatinas por todas partes complementan la estategia de saturación. Que crea una sensación de falsa hegemonía de opinión. Los del sindicato aseguran que prácticamente todos los periodistas rosarinos están a favor, y que si no lo dicen en voz alta es por temor a perder sus trabajos. No es así, ni ahí, pero bueno, ellos polarizan, K polariza, las patronales sacadas polarizan. Y todos perdemos. No, todos no: los K ganan y los gremios y sus orgas también, porque esperan tener sus medios, ganarse una tajada en todo este lío. Hay en este posicionamiento tan fuerte dos niveles: uno, este, del beneficio corporativo, sectorial. Todos hacen mérito para el día de mañana ir a pedir un cargo en los futuros medios "comunitarios". "Acordate cómo milité por la ley", será el latiguillo esgrimido ante un influyente despacho sindical cercano al Monumento a la Bandera. Pero hay un segundo nivel, menos inmediatista e interesado, ideológico. Este universo de facultad de comunicación, sindicatos de la CTA y "trabajadores de prensa", sector que es lector impenitente de Pagina 12 y portador de una concepción maniquea y militante del periodismo, confluye en esta sensación de "se viene la derecha", de ahora o nunca. Estamos transitando, en su visión, los últimos dos años de "gobierno popular". Lo que venga después, como será "derecha", aunque saque una marea de votos, no será "popular" ni, claro está, "nacional". Este nacanpopismo berreta, de cabotaje, situado cultural, politica y vivencialmente a años luz de la socialdemocracia, siente, como Néstor, que está jugando su último partido, dando su última batalla. Al menos, la última desde esa privilegiada posición de poder que es el gobierno nacional. Nunca antes este sector tuvo a su favor a un gobierno nacional, no al menos desde el 73 y el Tío Cámpora, y sabe muy bien que nunca más lo tendrá después de 2011. El muestrario de precandidatos presidenciales que surgió del 28 de junio los dejó mudos, blancos de bronca e impotencia. Lilita, Cobos, Reutemann, De Narváez, Macri...daba lástima verlos digerir esa realidad, mascullando por los pasillos "vuelve el menemismo". En ese clima ominoso surge la ley de medios. Todos creen, como los K, que perdieron ante el campo, primero, y luego las elecciones del 28 de junio, por tener en contra al establishment mediático. Lo creen seriamente, como también, por ejemplo, creen que la "sensación de inseguridad" es creada exclusivamente por los medios, sin ninguna participación del registro vivencial directo. Este negacionismo vehiculiza el anticapitalismo visceral del sector, que ahora, con Néstor como aliado, va por los odiados medios privados. Que serían irrepresentativos del sentir y, sobre todo, de los intereses populares, y agentes de "naturalización" de la violencia social necesaria para imponer el capitalismo. Por esto, si en lo táctico y corporativo se apuesta a la ley por obvias expectativas crematísticas y laborales, en el nivel ideológico y estratégico, se comparte plenamente el "espíritu" de la ley, que es comunitario, antiprivado, intervencionista y punitivo contra los empresarios. Es como decir: nos vamos, nos sacan, ganó la derecha; sí, pero desde esta batería de medios populares y nacionales vamos a denunciar la "entrega" que se viene.

domingo, 4 de octubre de 2009

Los enormes costos sociales del "progresismo"

En 2009, Venezuela y Argentina volverán a tener los índices más altos de inflación del continente, pese a caer ambas economías en recesión. Y en 2010 repetirán seguramente ese récord negativo, pero con el agregado de que crecerán menos que los demás países, o simplemente no crecerán. Algo tendrán en común si presentan los mismos síntomas. Los analistas políticos suelen decir, y con toda razón, que es incorrecto hacer paralelos lineales entre chavismo y kirhcnerismo. Pero está claro que estos dos gobiernos, así como los de Ecuador y Bolivia, mantienen puntos en común en materia económica. (Atención: acá nos ponemos en economistas). Todos estos gobiernos han acentuado el ciclo económico mediante gasto público, además de aplicar una extrema regulación de la economía. El caso argentino en el bienio 2007-08 es emblemático al respecto. Con el objetivo de ganar las elecciones presidenciales de ese año, el gasto creció verticalmente, tomando una dinámica que aún hoy resulta difícil de controlar. Por entonces el gobierno desechaba por neoliberal la opción de “enfriar la economía”, como sugerían los especialistas privados. Que tenían razón, porque esa inyección extra de vitaminas sobrecalentaba la economía muy por encima de las posibilidades de la oferta, siempre condicionada por el bajo nivel de las inversiones, una constante durante todos los años del kirchnerismo. Si se suma la compra de dólares permanente que hacía el BCRA, se tiene la inflación alta que se instaló en 2007 para no irse nunca más, y que tanto tiene que ver con el retorno de la pobreza a tasas iguales o peores que las de los años 90 (a ojo, diría que mucho peores). Hoy los privados consideran que el efecto arrastre por sí solo forzará en 2010 un aumento del 10% del gasto. Y si la tasa de inversión siempre estuvo baja en los años de crecimiento a tasas chinas (03-07), es lógico que lo esté más aún ahora, cuando a la recesión se suma la hostilidad abierta entre el gobierno y los empresarios (es instructivo volver por un momento al pasado reciente y recordar, por ejemplo, al titular de la UIA y a muchos otros grandes empresarios aplaudiendo en la Casa Rosada la estatización de las AFJP). El asunto es que hoy Argentina está metida en una trampa de baja inversión, alta inflación, desaparición del superávit y devaluación persistente (24-25% anual), además de una brutal fuga de capitales. Un escenario que recuerda a los años 70 y 80. Lo único "positivo" es el superavit comercial, forzado en gran parte por las terribles Morenomics, que prohiben en muchos casos las importaciones. De ahí que comience a hablarse entre iniciados de la vuelta de la emisión sin respaldo para financiar las erogaciones del Estado. Sería el broche de plomo de la administración K.
Volviendo a la región, los países bolivarianos se han encontrado con un gasto ya muy alto cuando debían, por la llegada de la crisis internacional a fines de 2008, aumentarlo para suplantar a la demanda privada. Pero como el Estado ya recalentaba la economía desde mucho antes por razones propagandísticas, no tenían cómo suplantar al gasto privado. Además, el retorno del crecimiento se hará esperar porque no hay inversión privada, ni interna ni mucho menos externa. Nadie, entre empresarios e inversores, confía en estos gobiernos. Venezuela tendrá en 2010 el doble récord regional de la más alta inflación y de ser el único país que no crecerá. Una lección interesante para quienes, a raíz de la crisis internacional, reforzaron su credo estatista. Los países más pro-mercado _Chile, Perú, Brasil, Uruguay_ son los que volvieron más rápido al crecimiento. Los más alejados de esta orientación son los más afectados por la recesión y los que más tardarán en salir. La lección no podría ser mas clara. Pero muchos se negarán, en su ciego ideologismo, a aceptarla. Aunque sus países sufran en carne propia esa ceguera, como pasa con Argentina. El retorno de la pobreza a niveles récord, en un contexto de estanflación crónica, será seguramente la tumba política de los Kirchner, que según las encuestas están apenas en un 20% de apoyos, en otro enorme contraste con sus presuntos socios ideológicos de Brasil, Chile y Uruguay, que vuelan por encima del 60% en todos los casos.
La caída de la actividad con inflación y la simultánea subida de la pobreza sirven para recordar que la tan meneada redistribución está sólidamente vinculada al crecimiento: y a nada más. En los años de las tasas chinas cayó fuerte la pobreza y mejoró la distribución, pero no por mérito del gobierno progresista y de sus "políticas de Estado", sino simplemente por efecto directo de ese gran crecimiento. Hubiera sido igual con un gobierno "neoliberal". No, hubiera sido mejor: porque un gobieno pro-mercado, con mejores condiciones para la inversión y baja inflación, hubiera dado lugar a un período de crecimiento más sólido y prolongado. Y ahora se estaría saliendo cómodamente de una breve recesión. Alguien debería hacer la proyección de cuántos puntos acumulados de PBI se perdieron por el sesgo "progresista" de la administración K entre 2003 y 2009, y de cuántos más se van a perder de aquí a diciembre de 2011. Y una vez hecho este cálculo estimar cuántos puntos de nivel de pobreza menos significaría ese crecimiento extra. Este último número sería la cuantificación del costo social del progresismo K.